El Gobierno nacional anunció que las concesionarias podrán realizar la verificación de autopartes de autos y motos, una tarea que hasta ahora estaba en manos exclusivas de la policía. Esta nueva regulación busca agilizar el proceso y combatir la venta de vehículos con autopartes robadas.
El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, fue quien oficializó la medida a partir de la implementación del decreto 181/2024, que permitirá que grandes concesionarias, con ventas de al menos 150 vehículos usados por mes, puedan verificar la autenticidad de las autopartes. Esto no solo reducirá la burocracia en las transferencias de autos y motos, sino que también facilitará la detección de autos robados o con piezas ilegales.
Otro aspecto destacado es que ahora los compradores y vendedores podrán gestionar las transacciones de manera remota. Federico Sturzenegger, ministro de Desregulaciones, subrayó que este avance permitirá a los usuarios realizar leasing y otras operaciones de forma más rápida y con menos costos administrativos, optimizando los tiempos tanto para concesionarias como para compradores.
Además de la verificación de autopartes, las concesionarias que cumplan con los requisitos también estarán habilitadas para certificar firmas. Este sistema funcionará con tecnología de validación biométrica, lo que brindará mayor seguridad y permitirá que los trámites sean más accesibles y rápidos, eliminando la necesidad de acudir a entidades oficiales para la autenticación de identidades.
El decreto forma parte de una serie de reformas que incluyen la eliminación de varios trámites tradicionales como el Certificado de Transferencia de Automotores (CETA) y el vencimiento de la cédula verde, lo que también reducirá los costos asociados con las transferencias de vehículos.
Cómo será en la Ciudad de Buenos Aires la verificación de autopartes
En cuanto a los precios, en la Ciudad de Buenos Aires el trámite mantendrá su valor en $36.731 para automóviles y $17.513 para motocicletas, con las verificaciones realizándose en las plantas de Devoto y Barracas.
Se detalló que la certificación de firmas no será necesaria en ciertos casos, como contratos de prenda o leasing donde intervengan entidades financieras o el Estado. Con estas medidas, se busca no solo acelerar el proceso de compraventa de vehículos, sino también reducir significativamente la carga burocrática para los usuarios y el mercado automotriz.