Contrariado por la interna judicial, Schiaretti pone sobre la mesa potencial candidatura en 2027

Compartir

Antes de viajar a las costas del Caribe mexicano por unos 10 días, Juan Schiaretti encabezó reuniones con los integrantes de su tropa y comenzó a diagramar lo que será la agenda política que desplegará en la primera parte del año próximo que comenzará en febrero, cuando inicie sus recorridas por la provincia de Buenos Aires y el resto del interior del país.

En Córdoba, referentes del entorno íntimo del exgobernador admitieron que “todo quedó muy mal” con Martín Llaryora tras los movimientos del actual gobernador en el Poder Judicial de la provincia. “Si esto sigue así y no se vislumbran cambios, hay que prepararse para un escenario de confrontación y nadie debería descartar que el ‘Gringo’ intente ser candidato a gobernador por cuarta vez en 2027”, aseguró un vocero del schiarettismo. ¿Definición apresurada o advertencia sobre que no es conveniente jugar con fuego? En principio parece una advertencia por los movimientos –algunos considerados destemplados– en el Poder Judicial y en el Tribunal Superior de Justicia (TSJ).

La Unicameral cordobesa sancionó la ley de Ficha Limpia y envió su mensaje a la Nación

Por lo pronto, Schiaretti dijo ante un grupo de compañeros de ruta que está convencido de que los cordobeses no le van a entregar el gobierno provincial a Luis Juez, quien ya hace tiempo que lanzó su postulación. A su vez, vaticinó que para que el peronismo sea desplazado del poder, es necesaria la irrupción de un dirigente disruptivo, con ideas diferentes, tal cual lo fue Milei en el país.

Temblor en el Palacio

El nombramiento de un grupo de funcionarios en la Fiscalía General y la convalidación de Jessica Valentini en el TSJ generó mucha incomodidad en la Asociación de Magistrados, en varios fiscales de instrucción y en la propia conducción del poder con sede central en calle Caseros al 500 de la capital provincial.

También Llaryora tiene un talonario de facturas para pasar, porque no le gusta lo que considera indolencia del TSJ, según los adláteres del mandatario provincial. Además, allegados al jefe del Ejecutivo provincial sostienen que Schiaretti le dejó un campo minado en diferentes estamentos de la Justicia. Por eso, la movida del nombramiento de Valentini tiene como efecto principal tener a “alguien de su confianza” en la cúpula judicial.

“Ellos hicieron lo mismo cuando pusieron a (Luis) Angulo”, protestan los laderos de titular del Panal. Sin embargo, hay que tener en cuenta un solo dato. Angulo tiene toda una trayectoria en el derecho mientras que Valentini no acredita pergaminos académicos ni jurídicos. Su trayectoria dista de ser una especialista de nota, como suelen decir los abogados, con ese lenguaje tan propio que tienen y que a veces suele ser incomprensible para el ciudadano común.

Lo concreto es que tanto el Tribunal Superior como la Fiscalía General están copadas por una gran cantidad de exfuncionarios provinciales, muchos de los cuales trabajaron con Schiaretti. Ahora Llaryora parece estar dispuesto a ocupar casilleros libres, lo cual hace que la batalla interna del Poder Judicial se libre en terreno fangoso.

El círculo íntimo del exgobernador se pregunta quién asesora a Llaryora en política judicial porque aseguran no entender sus pasos, a la vez que reconoce que no conoce los nombres de estos supuestos integrantes de la usina generadora de ideas.

Por su parte, desde el llaryorismo aseguran que el gobernador no comprende por qué los vocales del Tribunal Superior y la conducción de la Fiscalía General ni siquiera lo escuchan cuando recomienda poner en marcha algún proyecto específico para dinamizar la Justicia: Por caso, cuando propuso instaurar un sistema de territorialidad de los fiscales, le dijeron que sí, pero jamás lo pusieron en práctica.

La década más difícil de Talleres: el día que me quiebras

Asimismo, el gobernador esperaba gestos del TSJ y juzgó que algunos podrían renunciar debido a su edad. Sin embargo, nadie dio un paso al costado para lograr la renovación en el cuerpo. Pensaron que el vocal Luis Rubio podría retirarse, pero cada vez que se reflota el tema, el vocal manda a decir que por ahora no se jubilará.

Además, Llaryora desea que se retire Angulo, pero en este caso tampoco hay señales de apartamiento del máximo tribunal. Por ahora, la interna sigue y sólo se calmará si los dos jefes máximos del justicialismo cordobés deciden descomprimir la situación y vuelven a dar señales de convivencia pacífica. De momento, no hay nada de eso.

La meta de 2025

Schiaretti se tomará estos días de descanso de verano y volverá a las pistas a mediados de enero para retomar la actividad plena en 2025. Sus principales amigos tienen una coincidencia: resolverá si es candidato a diputado nacional por Córdoba en el segundo trimestre del año próximo. Para ello, hay algunas variables en juego como lo son, entre otras, la realización de las Paso. Si las primarias no se suspenden, todos los partidos y alianzas deberán apurar sus movimientos. Sí caen, podrán estirar las fechas antes de definir.

Schiaretti ratificó que analizará en profundidad lo que dicen las encuestas en Córdoba dentro de unos meses y también seguirá con detenimiento la evolución de los escenarios posibles en la provincia para determinar los pasos que dará en función del pedido de algunos aliados bonaerenses de otros distritos que soliciten que entre a la cancha en 2025.

“Están los que afirman que para armar un 2027 sólido hay que mostrar las cartas ganadoras y esas cartas son una victoria en las urnas de las elecciones de medio  término”, razonó un schiarettista histórico al analizar los futuros escenarios y referirse a la réplica-embestida del exgobernador contra su sucesor por los inconvenientes que se generan en la Justicia. Un tema para seguir de cerca.

Noticias Relacionadas