El aire del último programa de Lanata sin Filtro, por Radio Mitre, se colmó de una profunda tristeza durante el cierre. Minutos antes del mediodía, Jesica Bossi, quien tomó la posta del programa ni bien internaron en junio al periodista Jorge Lanata en el Hospital Italiano, agradeció a quienes pasaron por el ciclo y dio lugar a sus colegas para despedirse de su emblemático conductor. “Nos deja un vacío que no se puede llenar”, afirmó.
“Somos una familia, pasamos cantidad de minutos, horas y días juntos. Situaciones tremendas, difíciles. Hicimos periodismo, del bueno, del mejor, con el uno que es Jorge Lanata. Único, inconmensurable e irrepetible. Al menos, en estas tres cosas creo que estamos de acuerdo de lo que es su esencia”, dijo Bossi. Inmediatamente, con la voz quebrada, Cecilia Boufflet sumó: “Pensé mucho en eso que leyó Flavia Pittella el otro día, sobre bajarse de un tren”.
Y continuó: ”En ese texto decía ‘hay trenes de verano’ y Lanata sin filtro fue un tren de verano para mi porque, si bien esto era una montaña rusa y exigente, todo el tiempo era disfrute y era espectacular. Ese texto también decía ‘me he bajado de trenes malherida’. Bueno, hoy nos bajamos de este tren malheridos por la partida de Jorge, que todos esperábamos pero que nunca queríamos que fuera noticia”.
El columnista Julio López fue el siguiente en despedirse de Lanata. “Solo quería decirles gracias a todos, los que nos escucharon, los que lo siguieron a él y lo estamos siguiendo ahora. Nos vamos a respetar todos como familia y nos vamos a seguir apoyando, contamos con ustedes también”. A su lado, Juan Caparrós siguió: “Chau, Jorge. Haber estado acá fue un orgullo y un placer. Haber estado acá con ustedes fue lo mejor que me podía pasar hoy. Gracias. Chau, Jorge”.
El encargado de cerrar el mensaje fue Santiago García, quien sostuvo, con gran pesar: “Sé que todos los que formamos Lanata sin filtro hoy a la medianoche vamos a estar pensando en Lanata y eso nos va a unir una vez más. A los oyentes, les pido lo mismo, que hoy piensen en Lanata. Vamos a estar unidos una vez más para despedir este año, para despedirlo a él y para despedir este programa increíble. Irrepetible, que ya forma parte de nuestra vida”.
A lo que Boufflet sumó: “Jorge decía que cuando nos vamos nos transformamos en una estrella. Así que esta noche seguro vamos a encontrar una”. “A mirar el cielo esta noche. Te queremos, Lanata. Beso al cielo”.
La Casa de la Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, en plena Avenida de Mayo, fue este lunes el lugar de despedida a Jorge Lanata. El cuerpo del periodista llegó en una unidad de traslado pasadas las 23 de anoche, mientras afuera lo esperaba una larga fila de personas para poder darle un último adiós. En la puerta del edificio, familiares, allegados, colegas y seguidores lo recibieron entre aplausos.
Cerca de las dos de la madrugada concluyó el evento fúnebre que se reinició a las siete, antes del sepelio en el Cementerio Campanario Jardín de Paz, en Florencio Varela.
Las hijas de Lanata, Lola y Bárbara, fueron las primeras en llegar en la noche del lunes, caminaron con rapidez y gestos serios hacia el interior del lugar. Mnutos después, un auto estacionó frente a la entrada: Elba Marcovecchio, su esposa, descendió sin mirar hacia los costados. La pareja del periodista se retiró a la medianoche, junto con su madre y un equipo de seguridad que las escoltaba. Sin dar declaraciones, se subió al vehículo que las retiró del edificio.
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