La empresa de insumos Surcos, que está concursada desde febrero pasado tras una cesación de pagos durante diciembre de 2024, anunció a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que no podrá hacer frente a nuevos compromisos.
“Continuando con lo informado en los hechos relevantes publicados con fechas 13, 20 y 30 de enero, 14 y 28 de febrero, 31 de marzo, 14, 21 y 30 de abril y 8 y 27 de mayo del corriente, considerando la situación que se encuentra atravesando la Sociedad, y que la Sociedad se encuentra en concurso preventivo de conformidad con lo previsto en la Ley de Concursos y Quiebras N°24.522, por medio de la presente, se hace saber que la Sociedad se encuentra imposibilitada de abonar el onceavo pago de servicio de las Obligaciones Negociables Serie IX, que asciende a la suma de US$25.716,81 y al segundo pago de amortización de las Obligaciones Negociables IX VS que asciende a la suma de US$3.751.090,85, encuadrando como un Evento de Incumplimiento bajo los términos y condiciones del prospecto del Programa y del Suplemento de Prospecto”, señaló en una carta al organismo firmada por Miriam de los Ángeles Tasso, responsable de Relaciones con el Mercado.
En la misiva se señala que también “la Sociedad no se encuentra en condiciones de abonar los pagarés bursátiles cuyos vencimientos operan entre julio 2025 y diciembre 2025 que ascienden a la suma de US$900.000”.
Agregó: “Se deja constancia de que tanto los pagos de servicios y amortizaciones de las obligaciones negociables en circulación de la Sociedad como los pagos debidos conforme a los pagarés bursátiles, son deudas originadas por causa anterior a la presentación de la Sociedad en concurso preventivo y, por ende, se consideran comprendidas en el mismo conforme lo previsto por la Ley de Concursos y Quiebras N° 24.522”.
Vale recordar que Surcos se presentó en concurso el 3 de febrero pasado. En ese momento el dato conocido era que debía unos US$73 millones.
En diciembre pasado, la firma entró en default tras incumplir un pagaré por US$500.000. El incumplimiento abrió las puertas a una situación complicada ya que se sobrevinieron embargos. A septiembre de 2024 su caja ascendía a US$134.000, mientras que debía afrontar vencimientos por US$24 millones en los siguientes seis meses, de los cuales US$13,5 millones correspondían a pagarés bursátiles. El 2023 fue un año difícil para las empresas de insumos fitosanitarios: se cayó más de un 30% el mercado de agroquímicos, lo cual redujo las ventas de las compañías.