El gobierno de Javier Milei dio un nuevo paso hacia la desregulación del mercado aerocomercial, al autorizar el uso de aeronaves y tripulaciones extranjeras en los servicios de cabotaje. Se otorgaron facultades a la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) para aprobar que personal extranjero participe en las operaciones aéreas nacionales y que se utilicen aeronaves de matrícula extranjera cuando las aerolíneas lo soliciten. Esta medida busca palear los sucesivos paros de tripulantes de Aerolíneas Argentinas al dar disposición de personal extranjero.
Este cambio, que se dio bajo el decreto Nº 844/2024 en el Boletín Oficial, tiene como objetivo agilizar las gestiones y fomentar un entorno más competitivo en el sector aerocomercial, alineándose con los estándares internacionales. Hasta el momento, estas decisiones dependían exclusivamente del Poder Ejecutivo, pero con esta modificación, será la ANAC la que determine los procedimientos y autorice estas prácticas.
Esta medida se enmarca en el conflicto que persiste con Aerolíneas Argentinas, empresa estatal que ha sido el foco de múltiples negociaciones para su posible privatización. Mientras el gobierno sigue buscando alternativas para avanzar en ese proceso, la desregulación del mercado busca abrir más oportunidades a compañías extranjeras que deseen operar en el país.
El decreto establece que la ANAC deberá reglamentar los artículos 106 y 107 del Código Aeronáutico para definir los procedimientos técnicos que permitirán la incorporación de personal extranjero y la operación de aeronaves de otras banderas. De acuerdo con el comunicado oficial, este cambio busca mejorar la conectividad federal y atraer nuevas inversiones al país.
Los detalles del decreto de desregulación aérea
«El decreto N° 844/2024 se realiza en el marco del reordenamiento integral de la legislación aerocomercial, con el objetivo de agilizar las gestiones administrativas y promover un mercado competitivo y flexible para que más personas puedan usar el transporte aéreo y así llegar a todas las ciudades argentinas», se explicó en el documento difundido por el gobierno.
Asimismo, se mencionó que la nueva normativa debe armonizarse con los estándares internacionales en materia de comercio de bienes y servicios, lo que permitirá una mayor integración con los mercados globales. La desregulación no solo busca aumentar la competencia, sino también asegurar que el sistema aéreo nacional opere con los máximos niveles de seguridad y eficiencia.
El comunicado concluye que estas políticas de apertura se enmarcan en la estrategia general del gobierno para fomentar un mercado más libre y accesible, generando una oferta más diversa para los pasajeros y beneficiando a la economía nacional mediante la competitividad.