Una mujer de 32 años mató a puñaladas a su novio en medio de una discusión por celos en la localidad bonaerense de González Catán. La pelea se desencadenó porque la víctima saludó a otra joven en la calle, quien también recibió heridas de arma blanca, aunque se encuentra fuera de peligro.
El hecho tuvo lugar pasada las 5 de la mañana del lunes 21 en el cruce de las calles Balboa y La Bastilla. La agresora fue identificada como N. A. P., mientras que las iniciales de su pareja, de 22 años, son M. H. G.. En tanto, la otra joven herida, también de 22, fue reconocida como L. C..
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Según informaron fuentes de la investigación, la mujer atacó primero a la joven en situación de calle mientras discutía con su pareja, a quien le cuestionaba la manera en que la miró y saludó. Acto seguido, apuñaló al hombre en la altura del pecho. Ante esta situación, los vecinos llamaron al 911 para reducir a la agresora, que lloraba al lado del cuerpo y todavía tenía el cuchillo en la mano.
Cuando los efectivos de la Policía bonaerense llegaron a la escena, encontraron a la víctima en el suelo, tendido boca arriba, con herida punzante a la altura del pecho. Junto a él se encontraba su novia, «totalmente ofuscada, fuera de sí”, que yacía inmóvil.
Por su parte, la ambulancia constató que el joven ya estaba muerto. También se identificó que la chica sufrió heridas superficiales, mientras que el hombre tuvo lesiones varias, una de ellas a la altura del corazón, que le provocaron la muerte.
En su relato a los oficiales, L. C. detalló que, minutos antes, la agresora caminaba junto a su pareja y él la saludó. Según contó, esa breve interacción habría desencadenado un ataque de celos de la mujer, que extrajo de entre sus prendas el arma con la que le provocó una herida superficial debajo de la axila izquierda. Después de ese ataque, “se abalanzó sobre su novio” y le asestó la puñalada mortal.
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Voceros judiciales informaron que N. A. P. quedó detenida por el delito de homicidio agravado por el vínculo. Si bien la víctima había denunciado amenazas y la Justicia le había dictado una perimetral, se seguían viendo. Sumado a esto, la atacante tenía antecedentes por haber realizado intimidaciones de la misma índole.
Las cámaras de seguridad de la zona captaron cómo la agresora se alejó del lugar y su pareja, gravemente herida, trata de alcanzarla, cayendo al suelo en dos ocasiones debido a la puñalada que había recibido. Tras el segundo tropiezo, la agresora volvió sobre sus pasos. Las filmaciones registraron la forma en que atacó reiteradamente al hombre, que casi no oponía resistencia.
MB CP